Con respecto a la otra implicada, identificada como Graciela (34), madre de dos niñas de 7 y 13 y, que fue detenida durante los allanamientos en el complejo de bungalows "Aires del campo", frente al cementerio municipal de Concepción del Uruguay, se acordó con la fiscalía que siga acompañando a una de sus hijas que padece una enfermedad oncológica y está siendo tratada en el hospital Garrahan de Buenos Aires. Se estima que en los próximos días regresará a Gualeguaychú (previa alta médica de la nena), y quedará alojada en un hotel a disposición de la Justicia. Al respecto, Graciela y Ariel Ricardo comparten la paternidad de las menores y se dispuso que independientemente que el padre se encuentre bajo prisión preventiva en la Jefatura de Policía, mantenga el vínculo directo con sus hijos en resguardo de los Derechos del Niño.
El abogado penalista José Morrison también solicitó que Cristián Adrián (quien padece una discapacidad) no sea apartado en la prisión preventiva de su tío, dado que es quien lo contiene e incluso es una suerte de traductor para que comprenda lo que está ocurriendo. Esta medida también fue aceptada por el juzgado de Garantías y no tuvo objeción por parte de la fiscalía, quien fue reconocida por el propio Morrison que actúa bajo la lealtad procesal.
Los hechos
A la hora de fundamentar el estado de sospecha, todavía no se puede hablar de certezas, la fiscalía enumeró siete hechos de estafas denunciados en Gualeguaychú, uno de los cuales fue en grado de tentativa porque no se pudo consumar por razones ajenas a sus autores.Todos los hechos denunciados y traídos por la fiscalía tienen un mismo común denominador: las víctimas eran personas de edad avanzada, bajo un ardid que convencía a las víctimas para cambiar billetes de cien pesos, dólares y en otros casos colocar un sello en alhajas de oro, generaron un perjuicio económico, siempre de manera conjunta y previamente organizada.
En el primer hecho lograron obtener un botín de seis mil pesos y un anillo de oro. En el segundo, la damnificada tenía 94 años, lograron 6.300 pesos y también la alianza de oro. En el tercero el botín fue de 3.900 pesos. En el cuarto, la víctima tenía 83 años, se alzaron con diez mil pesos y 42 mil dólares. En el quinto el botín ascendió a 1.800 pesos. En el sexto fue de 400 dólares. Y el séptimo hecho fue en grado de tentativa, dado que la víctima pudo evitar la maniobra de la estafa.
Por eso las fiscales encuadraron este accionar bajo el Artículo 172° del Código Penal, que reza: "Será reprimido con prisión de un mes a seis años, el que defraudare a otro con nombre supuesto, calidad simulada, falsos títulos, influencia mentida, abuso de confianza o aparentando bienes, crédito, comisión, empresa o negociación o valiéndose de cualquier otro ardid o engaño".