Policiales Causa Ilarraz

Investigan por falso testimonio al secretario privado del arzobispo Puiggari

El sacerdote declaró el jueves, y entonces el fiscal le advirtió que estaba testimoniando bajo juramento, frente a la sospecha de que no dijo todo lo que sabe sobre el caso en el cual se averigua delitos contra la integridad de menores.
El secretario privado del arzobispo de Paraná, Juan Alberto Puiggari, será sometido a una investigación por el eventual delito de falso testimonio. El sacerdote Mario Gervasoni, quien brindó su testimonio la última semana en la causa que investiga los abusos del cura Justo José Ilarraz en el Seminario, adonde fue prefecto de disciplina entre 1985 y 1993, no habría dicho todo lo que sabía sobre el caso. Y en Tribunales sospechan que sabe mucho más de lo que dijo.
Así lo entiende el fiscal Juan Francisco Ramírez Montrull, que está decidido a abrir una causa paralela al expediente principal de la causa Ilarraz. El caso de los abusos en el Seminario se rige con el marco legal del antiguo Código Procesal; pero la investigación por falso testimonio se hará bajo el paraguas del nuevo ordenamiento por lo cual quedará a cargo del fiscal, y no de la jueza Susana María Paola Firpo.
Firpo tramita la causa por los abusos, caratulada “Ilarraz Justo José s/Promoción a la corrupción agravada”, en la que ya declararon siete víctimas, que acusaron a Ilarraz de haber abusado sexualmente de ellos mientras eran adolescentes y permanecían como pupilos en el Seminario cursando los primeros años de la escuela secundaria.
Viajes. La jueza Firpo tomó la causa Ilarraz en noviembre de 2014 y antes de que finalizara el año judicial recibió una serie de testimonios, entre otros los sacerdotes Javier Balcar y Alfonso Dittler –actual párroco de Hasenkamp–, así como el rector del Seminario, Eduardo Jacob y el recientemente renunciado párroco de Nuestra Señora de Guadalupe, Gustavo Mendoza.
Pero este año hubo nuevos testimonios de sacerdotes, entre otros el rector de la delegación local de la Universidad Católica Argentina (UCA), Luis Alfredo Anaya, que integró el consejo presbiteral del exarzobispo Mario Maulión, que fue quien en 2010 recibió una denuncia de un grupo de sacerdotes a través de una carta, en la que le pidieron que denunciara a Ilarraz ante la Justicia.
Y la semana última, la jueza Firpo escuchó otro testimonio de relevancia: la del secretario privado del arzobispo Puiggari. El cura Gervasoni sabe mucho más de lo que declaró el jueves en Tribunales, dicen fuentes de la Justicia. Mientras Puiggari fue obispo de Mar del Plata, entre 2003 y 2010 –año en el que fue designado arzobispo de Paraná–, fue autorizado a fijar residencia en esa ciudad balnearia, acompañando a Puiggari.
Una fuente que conoce la causa Ilarraz desde el inicio contó a El Diario otro dato: Gervasoni, estando en Mar del Plata, habría participado de las reuniones que allí habría mantenido Puiggari con algunas víctimas, que viajaron especialmente cuando se supo de su nombramiento como nuevo arzobispo de Paraná. Reveló, además, que de uno de esos viajes habría participado el abogado Pablo Folonier, que fue quien primero asesoró legalmente a las víctimas.
El abogado Milton Urrutia, querellante en la causa Ilarraz, recordó otro dato: el 27 de junio de 2012, las víctimas presentaron una nota a Puiggari para solicitar una audiencia: esa audiencia se concretó durante la feria judicial de invierno de ese año. Entonces, se le solicito al arzobispo que Ilarraz cesara en su estado clerical, pero el asunto no avanzó demasiado, de modo que acordaron un nuevo encuentro. Llegado septiembre, la reunión no había tenido lugar por lo que insistieron ante el obispo. Fue entonces que Gervasoni tomó el teléfono y los citó a un encuentro que tuvo lugar hacia octubre.
El fiscal Ramírez Montrull señaló que “hay instrucciones del procurador (General, Jorge Amílcar García)” de iniciar una investigación por falso testimonio contra el cura Gervasoni luego de su última testimonial en Tribunales. “Esta investigación va a ser independiente de la causa”, aclaró.
–¿Con qué elementos se puede iniciar una investigación de ese tipo?
–Cuando se presentó en Tribunales dijo que no sabía nada de la causa Ilarraz, y nosotros tenemos elementos que dicen que sí sabe, que sabe de la causa. Él se prestó a la declaración, y cuando vino dijo que no conocía nada. Entonces, le dije a la jueza que le advirtiera que estaba prestando testimonio bajo juramento. Eso fue dicho en dos oportunidades. La querella estuvo de acuerdo con mi planteo. Hay que tener en cuenta que se configura el delito de falso testimonio por callar la verdad, por no decir lo que se sabe. Él dice que no sabe nada, y surge de distintas declaraciones que sabe, y que estuvo en muchas situaciones relacionadas con la causa.
La causa Ilarraz tiene dos fechas clave por delante: el lunes 20 será la audiencia fijada por el Superior Tribunal de Justicia (STJ) para debatir el planteo formulado por la defensa de Ilarraz que insiste con la prescripción de los delitos que se le imputan al sacerdote. Un día después, el cura está citado a indagatoria. En medio, uno de los testigos relevantes de la causa, el párroco de San Benito Abad, Leonardo Tovar, pidió ampliar su testimonio, aspecto que está siendo evaluado en la Justicia. Tovar es uno de los que más insistentemente reclamó que el caso Ilarraz fuese llevado a Tribunales por la Iglesia.
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