En cuanto a su embarazo, Dallys lo transita muy tranquila, incluso sigue con su rutina de gimnasio: "Es un amor enorme, absoluto, precioso y mágico. La verdad es que tengo a mi chiquita en el vientre, pero la siento como si estuviera afuera, ¡es una conexión tan hermosa! Sé cuándo algo le gusta porque empieza a zapatear, y cuándo algo no le gusta la panza se me pone dura".
"Cuando hablo con alguien tengo la sensación de que India cree que le estoy hablando a ella y empieza a patear y a moverse. Otras veces, cuando estoy estudiando, rindiendo un examen o pasando por un momento tengo, me empieza a empilar las lolas y yo me río. Me saca de donde estoy y me conecto con ella. Es increíble", detalló a revista Paparazzi.
"He vivido situaciones muy difíciles que todavía estoy tratando de procesar. Todos merecemos que nos pasen cosas lindas. Hoy no me imagino algo más grande que esto. El hecho de ser mamá y que esté sana y vital, porque es enorme y no se queda quiera. Creo que Nicolás y yo nos la merecemos. Solo espero que ella se merezca la madre que le va a toca , y que no se queje mucho", finalizó.