Tras la baja de Indonesia, esto permitirá que la Selección juegue un certamen del que se había quedado eliminado tras el fracaso en el Sudamericano de Colombia, con Javier Mascherano como DT.
Eso sí, hay una norma que impide que el Monumental o la cancha de Vélez, entre otros, sean sedes: la FIFA no permite que se desarrolle un Mundial en terrenos donde se juega otra competencia.
Entonces, Claudio Chiqui Tapia y compañía analizan cuáles serán los cinco estadios en los que se jugará la fase de grupos y la ronda eliminatoria hasta la final, que deben estar ubicados, además, en ciudades con la capacidad hotelera y logística adecuada para una competencia con el sello de la FIFA.
Al igual que las bajas de River y Vélez, lo mismo sucedería con el Cilindro de Avellaneda, que también había sido barajado como una posible opción.
Ante esto, el interior del país empieza a ser cada vez más tenido en cuenta. Hasta el momento, las opciones que parecen picar en punta son: La Plata, San Luis, Santiago del Estero, Mendoza, Salta y Chaco.
En estas zonas, las canchas disponibles son el Estadio Único Madre de Ciudades (Santiago del Estero), el Estadio Único Diego Armando Maradona (La Plata), el Estadio Único Villa Mercedes (San Luis), el Estadio Centenario (Chaco), el Estadio Malvinas Argentinas (Mendoza) y Estadio Padre Ernesto Martearena (Salta).
Los otros 23 clasificados al Mundial, además de Argentina que lo haría por ser anfitrión, son: Brasil, Fiji, Inglaterra, Nueva Zelanda, Colombia, Francia, Irak, República Dominicana, Corea del Sur, Gambia, Israel, Senegal, Ecuador, Guatemala, Italia, Túnez, Eslovaquia, Honduras, Japón, Uruguay, Estados Unidos, Nigeria y Uzbekistán.
