Sin objetivos en juego, el local reservó la totalidad de su equipo principal para encarar el miércoles próximo una de las semifinales de la Copa Argentina ante Talleres de Córdoba en el estadio de Newell's Old Boys.
Sarmiento, con su trabajo ya hecho en este torneo tras asegurar su permanencia en Primera División, tuvo la única situación de mediano peligro en el partido y terminó con protestas hacia el árbitro Pablo Giménez.
Los de Junín reclamaron un supuesto penal a Luciano Gondou por agarrón y una mano en el área de Banfield que no fue revisaba por el VAR a cargo de Facundo Tello.
Banfield cerró el campeonato con apenas dos victorias en casa, lo que lo ubicó entre los tres equipos de menor rendimiento como local.