El pequeño ingresó casi al filo del viernes a la sala de guardia del Alassia. Hasta el centro médico lo había llevado un familiar que, poco después, se retiró del lugar. El niño quedó internado. En la madrugada de este sábado, fuentes del hospital indicaron que se presentó la madre, minutos después de las 4, y se lo llevó.
En ese momento no estaba los resultados de los exámenes pedidos para determinar la causa de las convulsiones. Cuando los médicos los recibieron, entraron en alarma porque el de orina había dado positivo para cocaína. En valores peligrosos, indicaron según refirió el portal El Litoral de la ciudad de Santa Fe. De inmediato, las autoridades del Alassia cursaron los avisos obligatorios a la Justicia.
Los únicos datos para localizar al bebé corresponden a una dirección imprecisa, en cercanías de la subcomisaría segunda de barrio Santa Rosa de Lima.
No es el primer caso
En enero de 2019, en el mismo Hospital de Niños, hubo un caso similar. Una bebé de un mes fue llevada por sus padres con un cuadro respiratorio severo. Tras proporcionarle los primeros auxilios, los médicos comprobaron que había ingerido cocaína a través de la leche materna. Los estudios confirmaron la presencia de la droga en su organismo.
La madre de la beba asumió que amamantó a la niña, y también que ella había inhalado cocaína antes de hacerlo. La doctora Susana Mauviel explicó entonces que fue “un consumo pasivo que se produjo a través de leche humana”.
