La iniciativa comenzó a raíz del asesinato de Fernando Báez Sosa en la puerta de un boliche de Villa Gesell.
Se trata de un punto sanitario que cuenta con médicos, psicólogos, preventores y puntos de hidratación que acompañan y asisten a quienes salen de espacios bailables.
Este jueves se realizó la primera prueba piloto y, según el ministro, "los jóvenes se acercan de manera voluntaria".
"Sin ninguna duda nos sorprendió sin excepciones que los jóvenes pasaban por el gazebo que estaba instalado. También pasaron algunos artistas. Todos estaban muy agradecidos por la iniciativa. Les repartíamos café y agua. También realizamos tests de alcoholemia no sancionatorios. Creemos que es una buena experiencia y la vamos a dar a conocer", expresó.
