La oración, que fue presidida por el padre Juan Gabriel Cayo, capellán de la Escuela de Suboficiales de la Gendarmería, comenzó a las 20.15 en el centro del campo del anfiteatro José Hernández y se extendió durante algunos minutos. "Debemos poner nuestra fe en la esperanza de la resurrección. Contemplemos a la Virgen María. Había algo en su corazón que la mantenía en pie: la confianza en la palabra de su hijo", dijo el cura ante los presentes. Participaron de la ceremonia la delegación de Catamarca, para la cual competía Cossutta; las autoridades y colaboradores del festival, y los intendentes de Jesús María, Colonia Caroya y Sinsacate.
Luego de la oración, colocaron una ofrenda floral en el museo del festival recientemente inaugurado.