Según publica El Patagónico, la propuesta fue presentada por el consejero alumno de la carrera de Historia, Tomás Bobowski, y fue aprobada por unanimidad. "Logramos que se apruebe a partir de las leyes que existen y teniendo en cuenta que hay varias universidades que lo están usando. Lo que se resolvió es que todo el que quiera usarlo podrá hacerlo sin sufrir ningún tipo de corrección o intimidación. No es obligatorio", contó.
En el marco de la resolución, que admite la presentación de trabajos prácticos, monografías o tesis con lenguaje inclusivo, se les pedirá a los docentes que acepten como válidos tales trabajos curriculares.
A su vez, la medida será incorporada al reglamento de alumnos para que puedan exhibirla a los docentes que ocasionalmente se nieguen a tomar o corregir trabajos donde se use lenguaje inclusivo.