Alrededor de los dos años, Tito empezó a hablar en masculino. Cuando jugaba con su hermana quería el rol de varón. Un día hablaban de lo que serían al crecer y Tito no lo dudó: "Cuando sea nene...". Ya entonces pidió que lo dejaran de llamar A, para decirle Tito, también en el colegio. "Los chicos no tuvieron inconvenientes. Al ser A. un nombre poco común, no sabían si era de nene o nena. De hecho un día una nena dijo que un chico la había empujado. Cuando la mamá y la maestra recorrieron la lista de varones con ella, no aparecía en ningún lado el nene en cuestión. Después ella nombró a A. Para ellos él ya era un varón", contó al diario La Capital de Mar del Plata Guadalupe, su madre.
Para sus compañeros, él ya era un varón, dijo la madre de Tito
Las muestras de su identidad siguieron: a finales de salita de tres, pidió ser bombero y actuar con sus amigos y no con las nenas. En verano, se negó a usar bikini y quería cortarse el pelo corto. En el ámbito escolar, las cosas no fueron fáciles dado que no todos los padres comprendían cuál era el camino que transitaba Tito. Algunos criticaban a los padres, Guadalupe y Matías, y otros los invitaban a ir a la iglesia. "Yo no pretendo que todos entiendan, pero sí que al menos lo respeten", expresó la mujer.
Esa fue una reacción similar a la que obtuvo en el Registro de las Personas, cuando el año pasado fue a averiguar los trámites para hacer la rectificación de género, algo que permite la ley 26.743, la norma que hace poco cumplió siete años. "¿Vos estás loca? ¿Cómo le vas a cambiar el género a una nena de cinco años?", fue la respuesta de una empleada. El sueño de Tito se cumplió el lunes pasado cuando legalizó su cambio de género. Para la ocasión estuvo acompañado de su familia, y también amigos, profesionales de la Asociación por un Mundo Igualitario (AMI) y docentes de su colegio. Todos querían estar presentes para este momento tan especial. Así, se convirtió en el nene trans más chico de la ciudad de Mar del Plata en realizar el trámite.
Los padres del chico realizaron la rectificación de género de su partida de nacimiento, que le permitirá en diez días aproximadamente contar con su documento actualizado. "Quiero que en mi DNI diga que me llamo S.", dijo cuándo inmortalizó su firmó el formulario. No trascendió su nuevo nombre, que quedará para sus allegados, pero seguirán llamándolo como él pide desde los dos años: Tito.
El trámite lo convertiría en el más joven nene trans del país. Hasta el momento, la más pequeña según los casos conocidos fue Luana, la nena trans oriunda de la localidad bonaerense de Merlo.