Crédito: El Territorio
Crédito: El Territorio
En la víspera se conocieron ribetes dramáticos sobre su vulnerable condición de vida, que fue denunciada de forma anónima en la Dirección de Acción Social de la Comuna. Desde ese organismo alertaron a la Comisaria de la Mujer, cuyos uniformados acudieron al sitio indicado y hallaron al menor escondido, con claros signos de violencia física. Estuvo alrededor de tres días en ese escondite.
Fue inmediatamente rescatado y trasladado a la seccional Primera, donde fue alimentado y hasta miró dibujitos animados.
Los adultos que lo sometían a salvajes castigos, Silvia K. (27) y Ramón F. (34), permanecen detenidos en calidad de incomunicados a la espera de que el titular del Juzgado de Instrucción Tres de San Vicente, Gerardo Casco, los cite a indagatoria. El menor declarará en Cámara Gesell.
El menor proviene de un pasado bastante violento, que se remonta al tiempo que estaba al cuidado de sus progenitores biológicos. Su mamá padece retraso madurativo y luego de un proceso judicial se dictaminó que sea el padre quien se quede con la tenencia definitiva.
Pero los crueles castigos se repitieron y así como las cicatrices y lesiones en su pequeño cuerpo dan cuenta de los sometimientos, los vecinos de la familia dan fe de los malos tratos a los que era sometido, la mayoría de las veces por su madrastra.
Una vez que estuvo seguro, el menor narró los constantes actos de violencia a los que fue sometido, motivo que lo obligó -dijo- a huir del hogar. La situación la estaría padeciendo hace más de dos años y las heridas físicas que tiene serán difíciles de sanar, informaron las autoridades.
El relato del nene coincide con el de los vecinos que, por temor a represalias, no habían denunciado las escenas que presenciaban constantemente y las incontables veces que el menor se quedaba solo en la casa, mientras los adultos iban a la cosecha de yerba mate.
"Le hacían hacer todos los trabajos. Él (por el niño) cargaba agua con tachos, hacía de todo mientras ellos estaban sentados y si no hacía, el padre lo golpeaba. Un día escuché unos gritos, salí a mirar y la mujer le estaba cepillando la espalda para bañarle", contaron los vecinos. Eso se condice con lo que contó el nene sobre que lo obligaban a arrodillarse durante varias horas sobre tapitas de cerveza.
La gravedad del caso, que estaba la vista de todos y sin embargo no era denunciado, genera indignación por la falta de conciencia de lo esencial que resulta dar a conocer a las autoridades, aunque sea de forma anónima, este tipo de aberraciones.
"La gente tiene que ayudar, no puede ser que lleguemos a este extremo y nadie se acerque a informar. Yo realicé la denuncia mediante el dato que aportaron y siempre estamos para recibir y atender estos sucesos que ojalá no se sigan repitiendo", manifestó Juan Carlos Ferreyra, secretario de Acción Social de San Pedro.
"Caso terrible de tortura"
Justamente, una de las personas que mantuvo contacto con el menor desde un primer momento fue Ferreyra, quien brindó al diario El Territorio algunos detalles del aberrante caso de maltrato infantil y las gestiones que van a realizar para garantizar un cambio en la vida del niño.
"Es un caso terrible de tortura y maltrato. El miércoles realizamos lo necesario para sacarlo de ese lugar, higienizarlo, darle todos los cuidados y hoy (por ayer) lo que respecta a la instancia judicial. Lo primero fue conseguir un espacio adecuado donde llevarlo y junto a la Comisaría de Mujer y autoridades judiciales se consiguió alojarlo en un hogar de San Vicente. Igualmente vamos a seguir en la búsqueda de algún familiar que pueda hacerse cargo, y nosotros haremos el seguimiento porque queremos que esta vez se haga justicia", manifestó el funcionario.
Luego de recibir atención, el niño se encuentra en buen estado de salud. Se informó que es muy activo y se comunica de buena manera, expresando hasta los mínimos detalles de sus padecimientos con mucha claridad.
Por la realidad en la que se encontraba, no estaba asistiendo a la escuela y no contaba con el Documento de Identidad porque su padre lo había extraviado. En una requisa en la casa lograron encontrarlo, facilitando todas las gestiones que garantizarán el acceso a los derechos que estaban siendo vulnerados.
Rescate, asistencia y detenciones
El operativo para dar respuesta a la denuncia se concretó pasadas las 17 del miércoles. La casa abandonada donde estaba oculto se encuentra a unos 40 metros de la ruta nacional 14, frente a zona industrial y a unos 500 metros de la vivienda donde vivía con sus agresores. Los efectivos y funcionarios encontraron al niño asustado, con vestimenta sucia, tenía lesiones recientes y de vieja data en varias partes del cuerpo. Lo trasladaron hasta la dependencia policial, donde comió, recibió atención médica y pasó la noche en el hogar de ancianos local, ya que en el municipio sólo existe un hogar de niñas. Una vez que se conoció la identidad de los responsables, se procedió a sus detenciones. La mujer intentó darse a la fuga, pero no logró su cometido y pocas horas después dieron con el hombre, que no se encontraba en la precaria vivienda, construida al costado de un arroyo en un espacio verde hace poco más de seis meses.
