"La denuncia la hizo el comisario, quien dice haber visto al subcomisario en un colchón dentro de la dependencia recibiendo masajes, pero ninguna de las tres presas dijo haber sido obligada a realizar esos masajes y dos de ellas son masajistas de profesión", aseguró Mercuri al canal de noticias TN.
Precisó además que las mujeres declararon que "tenían una relación de amistad con el subcomisario" y que se mostraron enojadas "porque esta situación podría costarle la carrera policial", ya que se analiza si cometió además algún tipo de delito como el de "incumplimiento de los deberes de funcionario público".
Mercuri destacó que "ya está actuando asuntos internos de la Policía Bonaerense y que el propio comisario ya le dio una sanción".
"Al margen de que las tres presas aseguraron que no hubo abuso, coacción ni amenaza, no deja de ser una situación irregular", admitió.
