El trágico hecho ocurrió en Manantiales cuando el niño se asomó por una ventana que estaba abierta y cayó desde 8 metros de altura.
Las ventanas del departamento tenían una red de contención, pero había una de ellas que no contaba con esa medida de seguridad y fue por allí por donde cayó.
El chico se trepó a una cama, traspasó la ventana y cayó al estacionamiento. Fue trasladado rápidamente a un hospital, pero murió en el camino.
En el momento del accidente, en la casa estaba la madre del chico junto a un bebé de pocos meses. La mujer llegó a verlo caer y comenzó a gritar en forma desesperada pidiendo auxilio. En el lugar actuó la policía científica de Maldonado, localidad cercana a Punta del Este.