Sociedad Mar del Plata

Submarino: la hermana de un tripulante ayuna "hasta que aparezcan los 44"

S trata de Marta Vallejos, familiar del sonarista Celso Oscar Vallejos. "Soy muy creyente, esta es una prueba de Dios", dijo.
Lo llama "un sacrificio de fe" y cuenta que no sólo lo hace por su hermano, también por sus 43 compañeros. Marta Vallejos, hermana menor del sonarista y suboficial segundo Celso Vallejos, comenzó hoy un ayuno hasta el día que aparezcan los tripulantes del submarino ARA San Juan. "Va a terminar el día que los encuentren y los traigan de nuevo a casa".

Chaqueña, espera en Mar del Plata alojada en la casa de sus padres, y ayer se acercó a la base de submarinos para oír las novedades sobre la búsqueda. Al salir, contó que había comenzado a ayunar y pidió "al país que se unan, no por todo el tiempo, pero al menos un día, porque unidos yo creo que un milagro podemos hacer". Sostuvo que sus familiares y amigos la apoyan en su decisión. Ella, igual que su tío Claudio Sandoval, llevan los rosarios con cuentas de madera que hicieron los presos de la cárcel de Batán; se los hizo llegar el obispo de la ciudad.

"Soy muy creyente, estoy rezando mucho. Esto es una prueba de Dios para ver hasta donde llega la fe del hombre", explica.

Este domingo, unos 50 familiares los que a las cuatro de la tarde fueron a oír el informe del capitán Enrique Balbi.

Después del parte en que se les informó a las familias que había ocurrido una explosión en el submarino, cuando muchos se descontrolaron y lo insultaron, el contralmirante Gabriel González, sólo anticipó dos partes informativos más. Ahora el jefe naval los acompaña y siguen las novedades al tiempo que desde el Edificio Libertad las recibe la prensa.

"Está con nosotros (González), viene a acompañarnos en ese momento difícil y después se queda a explicar las dudas que puedan surgir, que siempre hay porque hay gente mayor que no entiende todo ese lenguaje técnico", relató a Clarín Claudio Sandoval, tío de Vallejos, y contó que el clima en ese salón es cada vez más tenso.

"Yo entro y se me contrae el estómago, es como ir a un velorio todos los días. Hay muchos que somos positivos, y la mayoría ahí tiene esperanzas. Hay contención, no hay absolutamente nada que reprochar a las autoridades. Ellos mismos están mal. Pero van pasando los días y no se entiende cómo con toda esa tecnología no encuentran nada, y algunos comienzan a perder la paciencia y hay quienes se irritan demasiado", dijo.

Tras el reporte, la mayoría de los parientes y amigos de los marinos se retira. Algunos están en casas de familiares y otros, quienes llegaron desde provincias, fueron alojados por la Armada en un hotel del centro.

Explica el tío del suboficial Vallejos que ayer los familiares esperaban recibir una buena noticia. "El golpe fue muy duro. Se sabe de los submarinos, de los aviones, de la tecnología, y al decirte que no hay nada, la desilusión es muy grande". Marta, la hermana del marino, anclada en la fe, entiende que se hace hasta lo imposible. "Los van a traer de vuelta".

Clarín.
El comentario no será publicado ya que no encuadra dentro de las normas de participación de publicación preestablecidas.

NOTICIAS DESTACADAS