La PSA, dependiente del Ministerio de Seguridad de la Nación, actuó de forma inmediata ejecutando el protocolo establecido para estos casos, el cual duró aproximadamente dos horas, y dio intervención al Juzgado Federal de El Dorado.
Luego de desalojar la aeroestación, efectivos del Grupo Especial de Explosivos (GEDEx) realizaron una minuciosa inspección en el patio de valijas y un control preventivo en la aeronave y zona de preembarque; posteriormente, el equipaje perteneciente al vuelo en cuestión fue registrado nuevamente y los pasajeros realizaron el check in sin inconvenientes.
Una vez confirmada la falsedad de la amenaza, el Aeropuerto "Cataratas del Iguazú" volvió a operar con normalidad.