En diálogo con Elonce TV, el titular del CGE, Martín Müller dijo que este cambio “es parte de un proceso que venimos dando de a pasos y nunca poniendo en riesgo el consenso que hemos construido. Allá por octubre de 2020 hubo muchas dudas respecto a la posibilidad de que la escuela fuera un ámbito seguro, donde pudiéramos garantizar el cumplimiento de los protocolos y este es un paso más en un proceso que, obviamente, genera ansiedades”. “Hay quienes pretenden que sea más rápido, otros no tanto, pero desde el Gobierno provincial estamos dando pasos firmes y por eso, luego del receso, estamos previendo extender la jornada, es decir, quitar el límite de cuatro horas de presencialidad como máximo, para que cada escuela en función de su curricula tenga un horario normal de funcionamiento y a su vez, suspendimos las instancias de jornadas de no presencialidad de alumnos que había en los diferentes niveles, pensando en intensificar la cantidad de días de clases en el segundo semestre”.
Esta modificación comprende a todos los niveles, con algunas particularidades, y exceptuando la modalidad especial que sigue teniendo instancias de no presencialidad.
Paso seguido, Müller aclaró que se mantendrá el sistema de burbuja, “proyectando en el mediano plazo poder ir hacia una presencialidad plena con la lógica de que los pasos que demos, tengan el mayor consenso posible”.
En tal sentido, el funcionario dijo que “queremos que este año podamos cerrar el ciclo, los estudiantes pueden tener calificaciones y ser evaluados y proyectar un 2022 con un criterio más cercano a la normalidad previa a marzo del año pasado”.
Finalmente, indicó que se seguirán vigentes los protocolos sanitarios implementados para los establecimientos escolares. “Para garantizar un ámbito seguro, las medidas son muy simples: hay que mantener el distanciamiento, la ventilación, la higiene y desde el Estado provincial estamos distribuyendo un refuerzo de material de higiene personal y de limpieza de los edificios para que estas medidas se respeten”. Elonce.com
