"La cantidad de lluvia caída ha sido dispar en los distintos departamentos de la provincia, por lo tanto, no podemos dimensionar el impacto", aclaró a Elonce TV el director provincial de Agricultura, Carlos Toledo, al comentar que "en algunos cultivares las precipitaciones llegaron tarde, donde hay un impacto serio de la sequía, y en otros, podrían recomponerse un poco".
"Con la deficiencia de agua que hay, en algunos lugares cayeron hasta 40mm que fueron fuertes y provocaron algún tipo de daños, como en el caso de las quintas hortícolas de Paraná", mencionó Toledo. "El cultivo de trigo comenzó con un perfil de humedad bastante escaso, que al principio se desarrolló adecuadamente e implicaba un consumo de agua del perfil del suelo que no se iba recargando porque los milímetros de lluvia caída eran por debajo de lo que correspondía, y en la situación actual se da un déficit en casi toda la provincia", explicó.
"La lluvia puede recomponer un parte del cultivo de trigo, pero también hay que tener en cuenta que las heladas afectaron algunos sectores", agregó.
Punto aparte, Toledo mencionó que "las esperanzas están puestas en los cultivos que se están desarrollando, como el maíz; los que están implantando, como el sorgo; y lo que viene, que es la soja".
"Tenemos expectativas para que se incremente la superficie de maíz y sorgo, que son dos cultivos muy importantes para la rotación y que permiten generar mano de obra en la provincia, pero son cultivos altamente demandantes en buenas condiciones ambientales y los pronósticos que no son muy alentadores de bajas precipitaciones, no estarían colaborando con la implantación de estos", advirtió el funcionario provincial.
"La agricultura en Entre Ríos es muy dinamizadora de la economía; pese a que tenemos una alta de proporción de soja", acotó al respecto.
"Hay departamentos más afectados por la sequía que estarían más cercanos a una situación de emergencia, pero no todo el territorio provincial", aclaró. (Elonce)
