En la reunión, celebrada en la Casa Rosada, también participaron el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, y el secretario de Industria, Fernando Grasso.
En representación de la Asociación de Fabricantes de Automotores (ADEFA) estuvieron Cristiano Rattazzi, por FCA; Gabriel López, por Ford; Marcus Cheistwer, por Iveco; César Luis Ramírez Rojas, por Scania; y Thomas Owsianski, por Volkswagen.
Además, participaron Juan Cantarella y Raul Amill por la Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes (AFAC); y Sergio Kalut y Claudio Cordero, por el Grupo Proa.
El nuevo acuerdo consiste en un esquema gradual hacia el libre comercio que durará diez años, en línea con el acuerdo alcanzado hace dos meses entre el Mercosur y la Unión Europea.
El convenio se agilizó luego de que Brasil y las terminales argentinas presionaran al gobierno de Macri para firmar la extensión antes del próximo recambio presidencial, tras conocerse los resultados de las elecciones primarias.
"Este nuevo convenio les brinda a las terminales automotrices y autopartistas nacionales un horizonte de previsibilidad, y les permitirá orientar sus inversiones consolidando un patrón de especialización que asegure escalas de producción más rentables", destacó Presidencia en un comunicado.
Argentina se encuentra entre los 20 principales fabricantes de vehículos del mundo en cuanto a capacidad instalada y el sector explica más del 40 por ciento de las exportaciones de manufacturas de origen industrial del país.
