La iniciativa viene de la bancada kirchnerista en la Cámara baja, y tiene de aliado natural al presidente de la comisión de Agricultura del Senado, Alfredo de Angeli del PRO de Entre Ríos. Este último proyecto tiene la media sanción de Diputados desde 2015, pero el debate en Senadores se pospuso hace dos años.
Según organizaciones ambientalistas, el proyecto que promueve Basterra arrasa en algunas de las conquistas que la lucha de los pueblos fumigados lograron, como en el caso de las zonas de resguardo, que definen las distancias mínimas que los productores deben respetar para fumigar.
Por ejemplo, para el caso de Córdoba, la ley provincial prohíbe toda fumigación aérea a menos de 1.500 metros de zonas pobladas; y las terrestres las restringe a sólo 500 metros. Incluso muchos municipios de la provincia definieron zonas de resguardo aún mayores.
El diputado, autor del proyecto, señaló que la norma forma parte "de una estrategia de tres etapas que, junto con la ley de envases ya aprobada, apunta a tener un marco regulatorio eficaz y que aborde de manera integral y de fondo esta problemática critica para la producción agropecuaria". (AIM)