
"No hubo motín, ni fuga", aclararon las fuentes policiales, quienes dieron cuenta que "tras el accionar de los Bomberos de la Ciudad se controló el foco ígneo que se había iniciado en el tercer subsuelo".
Por inhalación de monóxido de carbono, tres de los detenidos debieron ser trasladados, al igual que uno de los policías, al hospital Fernández, donde quedaron internados, ya fuera de peligro.
Sobre el resto de los presos, se detalló que eran 45 en total, tuvieron que ser evacuados hacia el patio de la comisaría y puestos a resguardo, mientras se sofocaba el incendio.