El hecho fue descubierto minutos antes de las 9 del martes, cuando un hombre identificado como Juan Adriel (40) se presentó en la guardia de la Estación Comunal de Policía de Daireaux y confesó que había asesinado a su expareja, Griselda Fuentes (27), con quien tenía cuatro hijos en común de entre 1 y 9 años.
Los efectivos de esa dependencia se dirigieron hasta la casa de la víctima, situada en Charo y Maipú, donde la hallaron asesinada de al menos una puñalada a la altura del tórax.
Además, en el domicilio los pesquisas secuestraron la cuchilla que creen que utilizó el asesino.
Los voceros dijeron que el acusado tenía una restricción perimetral vigente desde septiembre de este año por la cual no se podía acercar a la víctima, quien lo había denunciado por violencia de género en el Juzgado de Paz.
Sin embargo, la pareja, que hacía unos diez años se había formado, retomó el vínculo por motivos relacionados a la crianza de sus hijos.
La causa quedó a cargo del fiscal Fabio Arcomano, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio (UFIJ) 6 del Departamento Judicial Trenque Lauquen, quien aguardaba los resultados de la autopsia.
El representante del Ministerio Público, quien se hizo presente en el lugar del ataque, le tomará la declaración indagatoria al imputado por el delito de "homicidio agravado por el vínculo y en contexto de violencia de género".
Los pesquisas sospechan que el femicidio sucedió en el marco de que la joven mantenía una relación sentimental con otro hombre.
