Se trata de Domingo Verna, un militar retirado que la semana pasada asesinó a su propio nieto en la ciudad de Bahía Blanca.
La cámara de seguridad de su casa mostró que el joven lo agredió a golpes antes de ser separado por su novia. Minutos más tarde volvió al hogar, donde empezó a dar patadas contra el portón, hasta que su abuelo abrió la puerta y le disparó con un arma, que le provocó la muerte de manera casi instantánea.
“Tratándose de una persona mayor de edad, por un lado, y de un joven que lo había golpeado antes a mano limpia, el fiscal entiende que concurriría la legítima defensa pero que habría un exceso porque fueron cinco disparos”, había explicado la semana pasada el fiscal general, Juan Pablo Fernández.
En tanto que Zara declaró en el mismo sentido y afirmó que “es lógico que haya recurrido a un arma de fuego y haya repelido la agresión efectuando disparos”. El letrado sostuvo que “está fuera de discusión que no estamos en un caso de homicidio doblemente agravado” sino que se discute si hubo o no exceso en la legítima defensa.
Por último, Zara calificó a la familia implicada en el hecho como “disfuncional” y con “una conflictividad importante”, mientras que afirmó que el joven asesinado “era una persona con problemas del tipo psiquiátrico, diagnosticado con trastornos de la personalidad”. Fuente: (MisionesOnline)
