La comisaria Eliana Galarza, en diálogo con Códigos, manifestó que “a diario” trabajan con este tipo de problemáticas. “Son varias las personas con las que frecuentamos, en ciertas intervenciones en la jurisdicción y cada uno de ellos tiene una particularidad distinta. En el caso de la mujer (que protagonizó el hecho en la terminal) suele tener desequilibrios emocionales que la tornan agresiva y comienza a atacar a los funcionarios policiales o a las personas que tratan de contenerla para que desista de su actitud, que muchas veces pone en riesgo a quienes la rodean, como asimismo su propia integridad física”.
Al respecto, aseveró que se rigen en estos casos “por una ley de Salud Mental, por la cual debe oficial una voluntad de estas personas de querer ser asistidos, por eso es que el Hospital de Salud Escuela recibe a las personas, pero no puede tenerlos contra su voluntad; la función primordial de ellos es estabilizarlos”.
Ante casos como estos “nos manejamos directamente con la Defensoría en turno, la que imparte las medidas que en un primer momento es un traslado forzado, ya que generalmente en las primeras actuaciones la persona está totalmente desequilibrada y se la lleva al hospital para que sea estabilizada. Es a la Defensoría a quien se le remite los informes para que siga con el hospital interviniente”, dijo. En tanto, el subcomisario Romero, desde la comisaría segunda dijo que han participado de capacitaciones de las cuales también participan distintas áreas de Salud pública, Defensoría, distintas comisarías, para aunar criterios a la hora de intervenir”. Agregó que en este tipo de casos “enseguida le damos participación a los efectores de salud pública, personal de Salud Mental o Emergencias Médicas”.
Dijo que el personal policial “está preparado para este tipo de situaciones, tratando de no agravar la situación, siempre llegando primero con el diálogo, buscando localizar a un familiar, a un vecino, para tranquilizar a esta persona”.
Asimismo, Galarza detalló de un caso ocurrido hace dos meses, en que un hombre de más de 45 años, en Boulevar Racedo, entre Irigoyen y Belgrano que” estaba muy desequilibrado, no entraba en razones, logramos que un familiar se acerque. Como estaba fuera de sí, tres funcionarios policiales y yo buscamos subirlo a la ambulancia, y cuando está por ocurrir esto, saca de entre sus prendas, dos cuchillos y en ese momento nos dijo que al que se le acercara ‘lo iba a cortar’. Hicimos un informe de la situación, pedimos refuerzos del Grupo Especial, que con escudos intervino; así y todo esta persona cortó a uno de los funcionarios en una de sus manos, lo alcanzó a herir. Lo trasladaron en ambulancia”.
Asimismo, Galarza contó de un caso de una mujer “de la cual tenemos conocimiento por Fiscalía que es portadora de HIV que, cuando entra en crisis y el personal policial se le acerca, empieza a tocarse sus partes íntimas, empieza a amenazar con contagiar al personal, con sangre infectada”. Elonce.com.
