Policiales A once años del fatal accidente

Irá preso el responsable de atropellar y matar a Ofelia Kessel en 2010

La Justicia dejó firme la sentencia a Victorio Ríos, condenado por atropellar y matar a la enfermera Ofelia Kessel. “Esperamos 11 años para tener justicia. El hombre nunca mostró arrepentimiento”, dijo a Elonce TV hijo de la víctima.
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La Justicia condenó a Victorio Ríos a la pena de tres años y ocho meses de prisión efectiva, además de ocho años de inhabilitación especial para conducir todo tipo de vehículos, por haber atropellado y matado a la enfermera jubilada Ofelia Kessel, el 10 de febrero de 2010 en Paraná. La sentencia fue dictada el 18 de diciembre de 2018 y luego de tres años, dejaron firme la condena.

“Hace diez días atrás nuestro abogado nos confirmó la noticia. El Tribunal Superior de Justicia, declaró inamisible el recurso extraordinario presentado por la defensa de Ríos”, expresó a Elonce TV Carlos Rodríguez, hijo de la víctima.
El acusado nunca había estado preso por el hecho, al respecto Rodríguez dijo que “creemos que fue por burocracia de la justicia. Se dilataron los tiempos, más de lo debido, esperamos un juicio durante ocho años y luego tres años más por la sentencia. Así pasamos 11 años y medios esperando que se haga justicia por mi madre y que Ríos vaya preso”.

La mujer era una jubilada de enfermería muy reconocida y apreciada, al igual que su familia. Ella iba caminando por avenida Blas Parera y Antonio Crespo el 10 de febrero de 2010 a las 14.30. Tras ser chocada, la enfermera de 68 años falleció a las 17 del mismo día en el hospital San Martín, donde había sido trasladada para ser atendida.
Sobre Sebastián Suarez, el acompañante de Ríos en el auto, se supo que “fue imputado por el delito de encubrimiento simple. Fue sobreseído en la causa y quedó libre”. En tanto, Victorio Ríos “cometió un delito, murió una persona, hubo una acción para escapar, escondió el auto y esa noche fue a trabajar, repartía diarios de un medio de comunicación y entregó periódicos con el hecho que él había cometido. La policía lo encontró durmiendo y nunca mostro algún signo de arrepentimiento”.

“Por fin la justicia dejó firme la sentencia”, finalizó. Elonce.com
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