Sus padres, que viven en Tres Arroyos y se habían alejado por un tiempo debido a su trabajo, los habían dejado al cuidado de la mujer, de 48 años, en un establecimiento rural de la zona. Al regreso, con aquella reacción de uno de los pequeños, comenzó a correrse el telón que escondía un horror.
Los nenes, de 6 y 7 años, señalaron a la abuela como quien les tocaba las partes íntimas y los obligaba a practicarle sexo oral. "Provocaba que se lo hicieran y ella misma también lo hacía con ellos", describió a Clarín una fuente judicial.
Los abusos habrían comenzado hace unos dos años, cuando los nietos comenzaron a quedarse solos con la mujer en el campo. "Les decía que era un juego y un secreto", reveló Natalia Ramos, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción Judicial 6 en Tres Arroyos.
Con la denuncia inicial de los padres, la causa se inició allí en mayo y avanzó hasta que a fines de agosto pudo realizarse una entrevista a través de la Cámara Gesell. Esa prueba terminó por convencer a los investigadores de lo que contaban los nietos sobre su abuela.
"Los dichos y señalamientos de los nenes fueron muy convincentes", precisó Ramos, sobre la pericia de la que participó la mujer acusada. La titular de la UFIJ 6 solicitó entonces a la jueza de Garantías Fabiana Brandolin la detención de la abuela, que el miércoles último fue capturada en el campo.
El operativo estuvo a cargo del Comando de Patrulla Rural de Tres Arroyos, que actuó “rápido y de manera discreta”, según resaltó una fuente policial. El celo con el procedimiento se debió al temor de que la mujer fuera agredida, al trascender en la zona el motivo de su detención.
Finalmente, fue trasladada de manera directa a Bahía Blanca, donde quedó a disposición de la Unidad Funcional de Instrucción Judicial 14, especializada en Delitos Sexuales. Ante la UFIJ 14, la mujer, que no tiene antecedentes, se negó a declarar y quedó a la espera de la liberación de un turno en las cárceles de la zona, para ser alojada, mientras siga el proceso judicial.
“La causa respecto de los dos nietos está prácticamente cerrada y luego del pedido de prisión preventiva, podría enviarse pronto a debate”, estimó un vocero judicial de la UFIJ 14. El expediente está caratulado abuso sexual agravado por el vinculo, entre la abuela y sus nietos.
"Tenía el deber de protegerlos y de cuidarlos. No los amenazaba, pero les decía que lo que hacían era un juego y debían mantenerlo en secreto. El efecto que eso genera en los nenes y en toda la familia es muy grave", remarcó Ramos.
Aún está pendiente de investigación una agresión sexual similar que la mujer habría realizado con otros dos nietos, primos de las víctimas, en el mismo campo. Estos hechos, en caso de comprobarse, podrían sumarse al expediente, antes de pedirse la elevación a juicio.
