“Me pidieron mi CBU, me dijeron que se habían equivocado, que habían agregado un cero de más y que necesitaban que le devuelva la plata. Me indicaron que congelaron la cuenta y que para desbloquearla tenía que ir al banco con mi teléfono, que ellos me iban a dar una clave para que yo le devuelva el restante que me dieron de más”, relató la mujer sobre la estrategia de los delincuentes.
Contó además que se lo pidieron “de una manera muy agresiva. Me asustó mucho. Me contactaron de mañana y a la tarde me decían que habían hecho el depósito. Les dije que en mi homebanking tenía saldo cero. Ahí me dijeron que no me iba a aparecer porque estaba congelada la cuenta. Insistían que vaya al banco”.
La mujer confió que “se asustó mucho porque si bien estamos necesitando el dinero, yo no quiero robarle a nadie. No me quiero quedar con una plata que no me corresponde. Me convencieron que yo tenía ese dinero. Estamos sin trabajo mi marido y yo, por eso decidimos vender el teclado. Lo hice por la aplicación de venta de Facebook. No sé cómo encontraron mi número de teléfono porque yo no había puesto mi número de teléfono, solamente pedía que me hablen por Messenger”.
Quien pretendía estafarla “me dijo que era un pastor de una iglesia de Santa Fe, que necesitaba el teclado para su actividad en la iglesia” detalló la mujer que agregó que “no era la primera vez” que ofrecía un producto por esa red social.
Le decía que “sólo tenía que ser de salario o de jubilación” la cuenta, agregó.
Afortunadamente la mujer se dio cuenta que buscaban estafarla y no accedió a brindar sus datos. Elonce.com