Los cinco participantes del robo escaparon por lugares diferentes. Ni en ese momento ni a más de 24 horas del hecho la policía logró dar con el paradero de alguno de ellos. Dicho desenlace, junto a la nula respuesta que reciben los comerciantes de la zona, no sorprendió a Tanya Núñez, la dueña de una red de 14 kioscos en la provincia de San Luis y Córdoba.
Una de sus sucursales fue la que sufrió el violento robo. “Es una cadena de 24 horas. Estoy cansada. Estamos cansados totalmente. Son más de 180 robos que hemos tenido durante diferentes lapsos. En la pandemia, en la crisis económica, todo el tiempo. Con estas características: haciendo destrozos, rompiendo las puertas, golpeando a la gente. Robando cosas mínimas. Estoy aterrada porque justamente en ese local está la comisaría federal a pocos metros”, reveló la propietaria en diálogo con Telefe.
Dos días antes de este suceso, en otra sucursal de la misma cadena -ubicada en la localidad de Villa Mercedes- una empleada sufrió el robo de su teléfono celular tras padecer golpes en su cabeza por parte de un hombre, que la violentó para reducirla mientras trabajaba.
“Son más de 189 robos en menos de cinco años. Con total impunidad. A cara descubierta, sin importarles nada, atracos de diferentes maneras. Siempre tres o cuatro. Ya es un abuso. Lo que más molesta es que estamos cerca de comisarías”, reveló Núñez.Y continuó: “Es un abuso, es una cantidad muy grande de robos. Es vivir con el corazón en la boca sabiendo qué va a pasar mañana. Somos un cajero automático de los ladrones y es increíble que lo tomemos tan natural. A la vez muy incómodo, siempre con nervios, tener que salir a mitad de la noche”.
“Con la pandemia, en Villa Mercedes no tenemos permitido abrir las 24 horas. Sí en San Luis y en Córdoba. Todo eso conllevan estas consecuencias. Esto no te da ninguna solución”, completó Núñez.
