Por tal motivo, los policías realizaron un acta con testigos dejando asentado que el hombre no se encontraba en la vivienda en la que debía cumplir con la orden judicial.
Minutos más tarde, mientras estaban de recorrida, los uniformados recibieron un llamado a la dependencia donde ponían en conocimiento que el sujeto en cuestión había vuelto a su casa.
Al regresar a la vivienda, fueron atendidos por este hombre, quien les manifestó que se había ido a comprar pollo.
Comunicado lo sucedido al fiscal, éste dispuso la detención y el traslado hacia la Alcaidía de Tribunales por el supuesto delito de Desobediencia judicial.