Posteriormente y mientras el hombre, enfurecido por lo que había pasado, atacó a golpes al delincuente, un grupo de vecino lo ayudó a retenerlo hasta la llegada de la Policía y trataron de calmar a la víctima.
Finalmente, después de unos minutos, el hombre se calmó y los vecinos mantuvieron cautivo al ladrón hasta que llegó personal de la Policía Motorizada.
Los vecinos también se quejaron porque, pese a estar a unos 400 metros de la Comisaría 2ª, los uniformados demoraron casi veinte minutos en llegar al lugar.
Los cadetes de delivery que pasaron por el lugar y que, en otros momentos, también retuvieron a varios ladrones en distintas situaciones, reconocieron al joven como un conocido asaltante.