Cuando salía del comercio con la plata de la caja y dos teléfonos, la pareja de la mujer embarazada y un amigo que estaban trabajando en el local de al lado lo atraparon y lo redujeron boca abajo en la vereda para evitar que se escapara y recuperar lo robado.
Lo que siguió quedó documentado en publicaciones de Twitter: un grupo de vecinos comenzaron a pegarle y a golpear su cabeza contra el asfalto mientras otros le sacaban los pantalones y la ropa interior.
El ladrón quedó entonces tendido en el piso sobre un charco de sangre, semidesnudo, con la cara y las manos completamente ensangrentadas. Después otro hombre se sentó sobre su espalda para inmovilizarlo, mientras el ladrón suplicaba que lo soltaran. "Quedate quieto porque te voy a romper todo, hijo de puta", se escucha que le decía uno de los agresores en un video.
Efectivos de la Comisaría 2° llegaron al lugar para aprehenderlo y entrevistarse con las víctimas pero, debido a la gravedad de las heridas que sufrió el hombre, debieron solicitar una ambulancia del Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (SIES). Luego de ser atendido por un médico, la policía lo trasladó hasta la dependencia policial para su detención.