De acuerdo con lo que expuso la misma, hace algunos meses conoció a través de las redes sociales a un muchacho de la capital entrerriana, el cual la invitó a viajar a esta ciudad y le pagó los pasajes.
Fue así que el pasado domingo llegó a Paraná. Siempre de acuerdo con los dichos de la chica, comenzó a vivir en una comunidad gitana, donde la obligaron a vestirse y adoptar costumbres de esa comunidad.
Mediante un teléfono celular logró tomar contacto con su familia que denunció el hecho en la Policía de Corrientes. Mediante un exhorto judicial solicitaron que intervenga la División Trata de Personas, que encontró a la joven en una vivienda de calle Newbery.
La situación legal quedará en manos de la Justicia correntina, dado que la víctima es oriunda de esa provincia, mientras que la muchacha regresará a Esquina.