Cuatro presos compartían la celda. Uno de ellos está detenido por violencia de género y los otros tres pasaban su tiempo hostigándolo. Después de un tiempo, los reclusos decidieron dar un paso más y contactaron a alguien en el exterior para que les hiciera de "mensajero".
El emisario debía contactar al hijo del preso que habían tomado de blanco y pedirle una suma de "entre 15 y 20.000 pesos " para que su papá "la pase bien en la cárcel". Lo que en su plan no tenían previsto, era que el joven hiciera la denuncia.
Los investigadores lo impulsaron a pactar con el sospechoso un lugar para la entrega del dinero. Así lo hizo y el hombre llegó, un poco después que él en moto, sin saber que lo esperaba la policía, indicó el diario El Día.
El hombre fue trasladado a la misma comisaría en la que se encuentran alojados sus presuntos cómplices, por el delito de extorsión. Hasta el momento, no hay ningún efectivo de la seccional involucrado en los maltratos ni en el intento de chantaje.
