El hecho se produjo alrededor de las 7.30 de hoy cuando la chica, identificada como Agustina P., de 23 años, se dirigió a un kiosco ubicado a pocos metros de la vivienda e intentó comprar una caja de vino y un sobre de jugo. Pero la chica se violentó con la kiosquera, quien intentó calmarla, al igual que una amiga que la acompañaba.
Luego, se dirigió a la vivienda donde vive su primo junto a su pareja y la pequeña hija de ella. Allí, según relataron algunos testigos, comenzó a gritar exigiéndole a la joven que le entregara a la chiquita porque quería completar "un pacto suicida".
Según se indicó, el joven intentó calmarla pero fue agredido con un cuchillo y huyó del lugar. Fue allí cuando su prima tomó un caño y comenzó a correrlo. Fue en ese instante en que la pareja del muchacho aprovechó para esconderse en el baño junto a su beba.
El muchacho, con algunas heridas cortantes, llegó corriendo hasta la seccional 21, ubicada a solamente 100 metros del lugar, y pidió ayuda a los efectivos, quienes lograron controlar y detener a la agresora. Segundos antes había arribado al lugar un móvil del Comando Radioeléctrico.
Los policías se dirigieron a la vivienda y debieron tirar la puerta abajo para rescatar a la shockeada joven y a su hija. La chica, Antonela F., de 20 años, contó a los policías que la joven intentó matarla a ella y a sus hijas.
La kiosquera que la atendió antes de dirigirse a la vivienda de su primo comentó ante la prensa que "es una chica conocida, que siempre viene a comprar. Esta mañana estaba como exaltada, pateó unos vidrios y me tiró un par de manotazos. Me llamó la atención porque siempre fue muy correcta".
Interviene el fiscal de Flagrancia Matías Edery, quien ordenó medidas investigativas. (La Capital)