Parte del equipo de investigaciones que comanda Dias, responsable de la Delegación Especializada de Atención a la Mujer, se dirigió hasta Candelaria para trasladar al detenido a Santa María.
Según informó la funcionaria brasileña, una vez que preste declaración, Rolón será alojado en la penitenciaria de esa ciudad. El hombre "deberá responder por tentativa de feminicidio", adelantó. Y dijo que se trata de un delito "grave, en el ámbito de violencia doméstica" y cuyas penas en ese país van "de 12 a 30 años de prisión".
"Ella estaba durmiendo y despertó de golpe, aturdida por gritos de todo tipo. Fue entonces cuando escuchó la frase «te voy a matar». y vio que su pareja le tiraba un fósforo sobre el pecho. Todo se volvió llamas. Ella salió corriendo a la calle para tratar de conseguir auxilio. Rolón no hizo nada para ayudarla y se dio a la fuga", narró la madre.
En 2006, Brasil aprobó la ley "Maria da Penha", con penas más duras por violencia doméstica y coloca el tema bajo responsabilidad del Estado. La norma fue apodada en homenaje a una bioquímica que luchó para que su marido fuese condenado por intentar asesinarla dos veces y haberla dejado parapléjica.
La figura de femicidio, incluido en el Código Penal brasileño en 2015 por ley 13.104, considera que una mujer es asesinada por temas de género cuando el crimen involucra violencia doméstica y familiar, o menosprecio y discriminación a su condición de mujer. También fija el feminicidio como agravante del homicidio. Además, si una mujer es asesinada estando embarazada, o enfrente de sus hijos u otros familiares, la pena aumenta un tercio. Lo mismo si la víctima es menor de 14 años, mayor de 60, o con deficiencia.
