Los dos individuos que corrían arrojaron un celular al suelo; los agentes demoraron a los dos jóvenes que resultaron tener 16 y 17 años de edad.
El niño golpeado, de 11 años de edad, informó a los policías que estando en la vereda de su casa, fue sorprendido por dos malvivientes,, que previo a golpearlo, le sustrajeron el smartphone.
Se puso en conocimiento del suceso a la Fiscalía en turno, disponiendo que ambos menores sean trasladados a la División Minoridad por el supuesto delito de robo en flagrancia.
Se secuestró el teléfono celular, el que fue devuelto a su propietario bajo acta de estilo, posterior a que el responsable del niño radicó la denuncia correspondiente.