"Queremos seguridad, que nos den una mano, que hagan algo, las cámaras que compramos a ellos ni miedo les da. Así no podemos seguir", manifestaron vecinos de Gualeguaychú.
En calles Luciana Ríos y Artigas, varios móviles policiales y la presencia del sub jefe departamental Cristian Hormachea, mostraban un escenario distinto en el lugar.
"Son grupos de vecinos que se han juntado, fueron a jefatura pero el jefe estaba en otra comisión y no los pudo recibir, así que he decidido venir hasta acá, juntarnos en el lugar y llevarles un plan a los vecinos para que ellos recuperen la tranquilidad que manifiestan haber perdido porque hay varios perjudicados en la zona con distintos ilícitos o hechos contra la propiedad", explicó Hormachea a Radio Máxima.
"Estamos trabajando sobre la investigación de los hechos. En estos momentos estamos levantando los registros fílmicos de las cámaras que han puesto los mismos vecinos y ojalá podamos ver a los autores, si se trata de los mismos o si son distintos. El plan de seguridad para la zona que plantee lo aceptaron y se implementa desde este momento", agregó el sub jefe. "Queremos seguridad, que nos den una mano. A las cinco de la tarde nos van a mandar un policía que quedará en la zona y el lunes nos recibirá el jefe de policía y veremos que más se puede hacer. Nosotros quisiéramos que esté de manera permanente, porque las cámaras solas ya vemos que no sirven", explican los vecinos.
Pero Celeste y Julián se van. Cierran. Se les acabó la fuente de trabajo. Les robaron dos veces en una semana y no les queda mercadería para vender.
"Nos tenemos que ir porque no nos dan los números. No pudimos reponer lo del primer robo y ahora con este segundo menos. El sub jefe dijo que va a dar una solución que va a poner a una persona que camine, que ande, no nos aseguran por cuánto tiempo y por ahí puede ser al principio pero después todo pasa, se olvida y volvemos a lo mismo".
"Mi marido estaba sin trabajo y los ahorros que teníamos los pusimos acá. Compramos el fondo de comercio y este pasó a ser nuestro trabajo. Lamentablemente nos quedamos sin nada para vender. Mientras estamos trabajando durante todo el día ellos nos están observando para ver cuando nos vamos y por donde entrar", dijo con mucha impotencia.