La denominada "Operación Chajá" comenzó con una serie de trabajos de inteligencia que arrojaron información precisa acerca del traslado de estupefacientes en la localidad de Paso de la Patria, provincia de Corrientes.
Frente a ello, el Ministerio de Seguridad de la Nación, instruyó a la Prefectura Naval Argentina para que fortaleciera los controles en la zona.
De esta forma, la patrulla de Prefectura detectó, sobre el kilómetro 1.246 del río Paraná, una lancha que tenía en su interior dos paquetes rectangulares envueltos en nylon negro. A cargo de la misma había un narco que oficiaba como "chajá", como se conoce al encargado de vigilar el territorio y hacer de "campana" ante la presencia policial.
Siguiendo con el rastrillaje, los efectivos hallaron un automóvil cerca de la embarcación. Dentro del mismo había 30 bultos de características similares a los incautados minutos antes. En total se contabilizaron 460 paquetes tipo "ladrillo", que, tras las pruebas de rigor, arrojaron un peso total de 387 kilos y medio de marihuana.
La droga, cuyo valor asciende a 15 millones de pesos, fue secuestrada por el Juzgado Federal de Primera Instancia N° 1 de la Ciudad de Corrientes.