Cuando un familiar llegó al lugar se encontró con que estaba dañada la puerta trasera y faltaba un colchón de una plaza y media, un ventilador de pie, una estufa eléctrica, un tv plasma, una plancha, una bolsa con ropa y un reloj de pared.
Inmediatamente hizo la denuncia y la Policía inició una investigación. En pocos minutos encontró los elementos robados a pocas cuadras, en una edificación cubierta con chapas.