Según las primeras precisiones, el menor de edad fue trasladado de inmediato al centro de salud frente a la plaza principal del barrio, pero murió cuando era atendido por personal sanitario del lugar, indica Diario Río Uruguay.
El personal policial no solo debió estar abocado a establecer cómo ocurrieron los hechos, sino que debió interceder para calmar a los familiares que llegaron a incendiar una vivienda en las cercanías del ataque y hasta apedrearon la autobomba que concurrió a apagar dicho incendio.
También trascendió que entre la víctima y sus agresores había problemas de vieja data.