En el requerimiento, el magistrado también pidió al ministro del Interior, Rogelio Frigerio, que "informe pormenorizadamente los materiales y procesos empleados" en la fabricación de los DNI tarjeta.
Cuando el cuerpo del joven tatuador fue hallado el 17 de octubre pasado, en sus bolsillos se encontraron alrededor de 300 pesos, un bastón retráctil, un encendedor y su DNI tarjeta en buen estado.
Durante la autopsia que se realizó en la Morgue Judicial de la ciudad de Buenos Aires, el cadáver fue sometido a varias pruebas para determinar la cantidad de días que estuvo sumergido en el frío curso de agua patagónico.
"Se calculó el tiempo de sumersión del cuerpo en las aguas por tres métodos diferentes: el primero estimó que el cuerpo estuvo más de 53 días en el agua; el segundo, más de 60, y el tercero, más de 73", había afirmado la familia de Santiago.
Frente a esa variada posibilidad de la fecha estimada de muerte, en diciembre el magistrado había pedido al Instituto Nacional de Tecnología Industrial (Inti) que analizara el DNI de Maldonado.
En ese marco, Lleral envió el 1º de febrero, cuando la Justicia concluyó la feria y en coincidencia con el cumplimiento de seis meses de la desaparición del artesano, un requerimiento a Frigerio para que haga algunos aportes al expediente.
El Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda tiene a su cargo el Registro Nacional de las Personas (Renaper), que se ocupa de la confección de los documentos de identidad.
En el escrito enviado al funcionario, el juez le pidió que "informe de manera urgente y pormenorizadamente cuáles son los materiales y procesos empleados en la fabricación de los documentos nacionales de identidad argentinos".
Asimismo, le pidió que le remita tres ejemplares de DNI con fotografía e inscripciones de nombres y datos ficticios "con la finalidad de realizar pruebas de durabilidad sobre los mismos de la manera más fidedigna posible" y poder cotejar los resultados con el documento de Maldonado.
El objetivo es someter esas tres copias a condiciones similares a las que se estima que pasó el cuerpo del artesano, que estuvo desaparecido durante 78 días y murió por "asfixia por inmersión" coadyuvada por "hipotermia", según coincidieron los peritos que participaron de la autopsia.
La familia planteó sus dudas respecto de que el cadáver del joven haya permanecido todo el tiempo bajo las heladas aguas del río Chubut, a la altura del departamento de Cushamen.
