Tras la exposición, los uniformados comenzaron a realizar las averiguaciones correspondientes, llegando de esta manera a inmediaciones de barrio El Pozo, donde finalmente se logró ubicar a Moro, más precisamente en cercanías al arroyo Antoñico.
Se puso en conocimiento de lo sucedido a la Fiscalía en turno, quien dispuso que el perro sea secuestrado y entregado a su amo, dándole intervención al veterinario en turno que constató el estado del animal.