Una vez en el interior y de acuerdo a lo informado por la policía local, se dedicaron a realizar destrozos en las tres salas dejando mobiliario, elementos de trabajo, juguetes y todo lo que encontraron totalmente arrasado y desparramado en los pisos de las aulas, publicó DíaUnoNoticias. Según establecieron los uniformados después de las primeras constataciones, los vándalos no robaron ni sustrajeron nada del interior lo que hace suponer que solo ingresaron con la idea de producir los daños que se ven en las elocuentes imágenes.
Un hecho de similares características había ocurrido el 6 de julio de 2016, con la diferencia de que en aquel momento los desconocidos robaron caloventor, un tapper de galletitas y dulce de leche.
La investigación está a cargo de la policía de Maciá de manera conjunta con personal de investigaciones y rastros de la Jefatura Departamental.
Según pudo saber Elonce este mediodía, autoridades de educación, señalaron que se tomaron "recaudos para reponer el material dañando en los jardines de infantes" de la Escuela de Maciá.