El propietario de la casa, un hombre de 37 años, fue quien solicitó auxilio y contó a los efectivos que un niño de 8 años que manipulaba un encendedor fue lo que había dado origen al foco ígneo.
Una vez que se lograron apagar las llamas, se pudieron constatar pérdidas materiales de consideración, ya que se quemaron muebles y ropa; mientras que el hombre y el menor no resultaron heridos.