Fueron sus padres los que llegaron al centro asistencial. La mamá, de 22 años, aseguró que le habían dado cocacola y hierro, y que por eso el chiquito se había descompuesto.
En ese momento a los profesionales de la salud algo no les cuadraba, ya que el bebé llegó a Luego, los análisis de sangre demostraron que el menor tenía cocaína en su organismo.
Los papás tienen otros tres hijos de 2 meses, 3 años y 5 años. Quedaron detenidos a disposición de la justicia y los niños con asistencia de la OAL.