Fue justamente delante de ellos cuando el 12 de marzo concurrió hasta el domicilio de la mujer en calle Tropas y comenzó a agredirla física y verbalmente.
La víctima, a fin de evitar inconvenientes, se encerró en el cuarto de los hijos, pero el hombre ingresó a los golpes, la tomó del cuello, la levantó y golpeó en la espalda, las piernas y la boca. La hija de ambos de 11 años intervino y evitó que el condenado continuara castigando a la mujer. (El Día)