La investigación de la Ertzaintza (Policía del País Vasco) comenzó el 19 de julio, cuando agentes especialistas de investigación criminal detectaron en las redes sociales la llamada al suicidio pactado de un grupo de personas, que iba a tener lugar sobre el fin de este año. Poco después, los agentes supieron que el gestor del grupo había adelantado la fecha de consumación de los suicidios para el 17 de agosto, aniversario al parecer del fallecimiento de una persona allegada suya. Siempre según la Ertzaintza, especialistas en delitos contra las personas y en tecnologías de la información de esa fuerza analizaron los rastros dejados por el grupo en las redes y remitieron solicitudes de información urgentes a las distintas empresas suministradoras de servicios de Internet. Y con su colaboración identificaron al inductor del suicidio colectivo, que al parecer se encontraba en la Argentina.
Así, vía Interpol, las autoridades policiales y judiciales argentinas, allanaron el domicilio del sospechoso en San José. En la habitación del menor, informa la Policía del País Vasco, se hallaron varios cuchillos, cutters y gasas impregnadas de sangre. El joven fue puesto bajo la tutela de especialistas psiquiátricos.
"La investigación prosigue en estos momentos para identificar a la totalidad de las personas implicadas, esclarecer completamente las circunstancias que envuelven el caso y, sobre todo, descartar la existencia de otros grupos que pudieran haber sido creados por el menor con las mismas intenciones", dice en un comunicado la Ertzaintza.
Clarín.