La detención ciudadana ocurrió a dos cuadras de la terminal de Capilla del Monte, en Córdoba. El chofer Diego Olariaga conducía su unidad cuando un pasajero le advirtió que algo ocurría en el colectivo: un hombre había manoseado a una chica en la parte trasera del coche y acababa de descender.
Olariaga detuvo la unidad y fue a ver a la chica que "temblaba como un papel", dijo.
Con mucha dificultad, la adolescente llegó a decirle que el pasajero la había manoseado. El colectivero bajó de la unidad y se fue detrás del hombre, que empezó a correr.
"Me decía que no había hecho nada y yo le gritaba que si no hizo nada para qué corría. Lo corrí una cuadra y media hasta que lo pude parar. Pasó un hombre en auto y le pedí por favor que llamara a la Policía", explicó Olariaga.
Este es el momento en que el chofer del colectivo logra detener al hombre y retenerlo hasta que llegue la policía. El sujeto, de 59 años, quedó detenido.