“Fue una experiencia hermosa. Cuando surgió el tema de la donación de órganos, mi hermana y yo fuimos las que nos postulamos para donar. Me empezaron a hacer los estudios y el 19 de abril lo llevamos a cabo. Gracias a Dios salió todo fantástico”, expresó Inés. Con respecto a su salud, comentó que “me encuentro en perfecto estado, hoy fui a control y me vieron bien. El doctor destacó que generalmente uno queda anémico después de la operación, pero en mi caso no”. Acerca de los controles, indicó: “Tengo que hacer vida normal, nada cambia en mí, salvo tomar mucho líquido como cualquier persona. Lleva un tiempo la recuperación a base de cuidados”.
Asimismo, se refirió a la importancia de donar: “Es dar vida. Si en mis manos está mejorar la calidad de vida de mi hermano, no lo pienso”. En tanto, Raúl, quien recibió la donación de órgano, expresó: “A mi hermana le debo todo. Es un cambio total porque la calidad de vida es otra”. “Vengo con este problema desde el 2013 hasta que entre en diálisis en el 2021 donde me prepararon para llegar a un trasplante. En ese momento, se empezó a llamar a los postulantes que querían donar y mi hermana se la bancó dándome una tercera vida”, añadió.
A su vez, se refirió al post trasplante: “Todavía no comencé a trabajar porque hace un mes que me operé y no puedo hacer fuerza, pero me dedico a las ventas de cosas que tengo acumuladas como repuestos, entre otros elementos”. Asimismo, destacó la importancia de donar: “Es importante que mi hermana haya tomado la decisión, el cual es un acto de amor, para devolverme un poco la calidad de vida y disfrutar de mi familia”.
Finalmente, sobre las recomendaciones que le sugirió el médico indicó: “Tengo que estar con los inmunosupresores que, de ahora en adelante, varían de acuerdo a las cantidades porque es alta la dosis debido a que el riñón se tiene que agarrar bien ya que el cuerpo a veces tiende a rechazar, pero en este caso donde somos idénticamente genéticos, hay una compatibilidad alta, lo cual me favorece”. (Elonce)