“Monseñor tuvo una deficiencia cardíaca el domingo a la tardecita. El médico prefirió internarlo, estuvo en terapia intensiva, pero gracias a la medicación que le dieron, evolucionó muy bien y según el informe médico, lo iban a pasar a sala en horas del mediodía”, comunicó a Elonce TV el vicario de la diócesis de Paraná, Eduardo Tánger.
Y agregó: “De acuerdo a su evolución, deberá permanecer unos días internado en la clínica, pero gracias a Dios evoluciona muy bien y su estado de ánimo también es muy bueno”. Al aclarar que el hisopado le dio negativo para coronavirus, el prelado instó a seguir rezando por la salud del arzobispo. “Él está en oración, rezando por toda la diócesis, por todas las familias, por toda esta situación tan difícil que estamos pasando todos”, resaltó.
En ese sentido, el vicario instó a rezar “por nuestro obispo, nuestro padre y pastor”. “Lo encomendamos especialmente en este año de San José para que lo cuide como cuidó al niño Dios, y también cuide a todas las familias en este tiempo de pandemia”, agregó.
