“Hay muchos árboles, que por diferentes cuestiones se llaman `de hojas Caducas´, que durante el otoño se ponen amarillos, en inviernos quedan pelados y durante la primavera vuelven a sacar hojas. Hay algunas especies donde sus flores aparecen primero y luego sacan las hojas”, expresó.
En las ciudades “es necesario que los arboles de las veredas sean caducos, porque durante el otoño y el invierno, las veredas se ponen demasiado húmedas, las fachadas generan hongos y los lugares se vuelven fríos”, expresó. “Los árboles se ponen con hojas amarillas, porque todas las reservas que tienen, bajan por los vasos, se acumulan en la corona de raíz y se guardan durante la temporada invernal. Por ese motivo, no hay que podar los árboles, porque se desperdicia un montón de reservas y se envejece la especie. Cuantas más veces se poda un árbol de forma errónea, más le acortamos la vida”, dijo la especialista.
Con los cambios climáticos “se vienen una intensificación de las coordenadas de calor en la ciudad, que van hacer cada vez peores. Por ese motivo, vamos a necesitar árboles que sombreen para que nos dejen caminar por las veredas”. Al respecto, remarcó la necesidad de no podar los árboles y “dejar que las hojas se caigan al piso. Se pueden barrer y hacer compostaje, pero no quemarlas. Los árboles, en la capa superior, adsorben polillos atmosféricos, contaminantes y demás, al hacer fuego, con el humo vuelven a la ciudad todos los contaminantes al ambiente”. Elonce.com